Oda, el cuento mágico - poema
Joaquín Sorolla, Elena a la playa di Biarritz, 1906, óleo sobre cartón. Museo Sorolla
Oda, tu eres la brisa y mi espíritu es el árbol
Quien desde los cerros más altos se lanza como un sable
Cuando lo escuchas;
Mi mente es el mar cuyo magnífico azul
Despierta la existencia con su aire puro.
Y siempre quedarás cautivado...
Cada palabra que te compone penetra profundamente
Adquiere así su magia que toca el corazón.
Estas melodías que hablan como un niño.
Y estos son sonidos que hacen temblar el cielo.
Alguna vez has imaginado que vuelan con sus alas?
Estos versos que se abren paso
Estás en mí como el sol en su galaxia.
Y su aire no te asfixia!
Sólo gracia, gracias a Dios.
Parece, por fin, que son auténticas yemas.
Que embellecen para ti las llanuras de flores e rosas
Esta oda que inventa sus cuentos
Commenti
Posta un commento